domingo, 5 de diciembre de 2010

Istanbul

Sé que se supone que no comentaremos comida rápida, pero tengo que hacerlo por motivos personales. Si bien es una tradición familiar esto de comer comida del medio oriente(más bien árabe) decidí probar este local de comida rápida "turca". Probé un falafel en pan pita con enslada de lechuga y tomate bañado con salsa de yogurt, aunque la especialidad son los doner kebabs, que nunca me han dado la suficiente confianza(en ningún local) como para probarlos(carne en fierro que rota, quizás por cuánto tiempo). Todo bastante bueno, los falafel estaban en su punto y las ensaladas y el pita fresco. Me extrañó la falta de humus entre las salsas(es como la mayonesa del medio oriente) y me sentí un poco decepcionada porque suelo acompañar mi falafel con humus y taboulé(mi chanchería personal), pero debo decir que para ser comida rápida, estaba bastante bien, lo disfruté(no todos los días se puede comer falafel así como así no más) y el precio fue razonable. lo que me decepcionó de sobremanera fue el café, de máquina y malo, para un local llamado Isantbul uno esperaría un café turco ¿o no? Aunque debo aclarar que el local es una franquicia española y los españoles nunca han sido conocidos por su café...

La Herrería de José Luis, al almuerzo y olé!

Hacía tiempo que tenía ganas de volver a La herrería de José Luis. Habrán pasado unos cinco años desde mi última visita y tengo muy buenos recuerdos del lugar (aparte de haber pasado un buen rato con uno de mis grandes amigos, estaba la memoria gustativa de un entrecot al ajillo que estuvo de pelos). En esa oportunidad fui a cenar a este restaurante español; en esta ocasión, aprovechando que estábamos de paso por el lugar y que recién había cantado Gardel, pasamos a la hora de almuerzo. A las 13:00 hrs., hora de apertura del restaurante, éramos los únicos comensales, así que la atención fue más que expedita. De fondo sonaba Jarabe de Palo en loop. Como lamentablemente debíamos regresar al trabajo, nos saltamos el vino, el postre y el café. Pedimos de entrada un pulpo a la gallega que estaba buena, el pulpo un tanto chicloso, pero regado con un buen aceite de oliva y sazonado con ají de color fuerte y sal gruesa. O sea, buen sabor, regular textura. En alguna parte leí que agasajaban a los comensales con papas bravas como cortesía de la casa, pero o fuimos muy temprano o esa tradición se acabó. De plato de fondo pedimos:
-Lomo a la española: lomo 3/4, bien preparado, cubierto de salsa de carne y acompañado de papas sufles, que eran pasa duquesas bien aceitosas, más fritas que doradas.
-Chuletillas de cordero: supongo que eran a la castellana. Estaban sabrosas, pero no exactamente tiernas. Estaban acompañadas de papas gauchas, ricas pero sin mayor sorpresa.
La entrada, los platos de fondo y dos bebidas salió algo así como $27.000. Un tanto abultada la cuenta para platos que en definitiva dejaron gusto a poco. O mejor dicho, un paladar un tanto aceitoso... (Sí, ok., otra cosa hubiese sido tomando un buen tinto...)
Al partir, dos sensaciones: luego de leer las dedicatorias enmarcadas de Volodia Teitelboim y de José Saramago, me quedó la impresión de que la preparación y degustación cambiaba si de premios literarios se trata. Y finalmente, la nostalgia por el restaurante que visité hace un tiempo atrás y que no fue el mismo que visité en esta ocasión.

http://www.laherreria.cl/

sábado, 4 de diciembre de 2010

Vietnam Discovery

Después de haber escuchado y leído tanto comentario acerca de este restaurante, finalmente lo conocimos. Para empezar, no se hicieron realidad todas aquellas amenazas acerca de la atención deficiente(porque lo atendían sus dueños, porque te echaban cuando venía el otro turno, porque si alegabas por la música te hacían ver que tu presencia no era necesaria), pues bien nos atendió un mesero con excelente disposición, la música a un buen volumen y siempre agradable y la mesa a nuestro lado estuvo vacía durante toda nuestra estadía(segundo turno de las 10 pm en un viernes), probablemente esto se explica porque el restaurante se agrandó y tiene una terraza en la parte trasera, especial para la temporada veraniega que se acerca. Sin embargo hay que aclarar que hicimos una reserva y probablemente es necesario pedir una especialmente si se quiere ir al primer turno, aunque recomiendo el segundo, porque así nadie te apura a terminar.
Comenzamos con un Vietnam Discovery de aperitivo, vodka, jugo de naranja y jengibre, más unos deliciosos arrolladitos nem de camarón y de cerdo, con una masa delgadísima de arroz, que luego se envuelven en lechuga y menta y se untan en una salsa liviana y levemente agridulce, una mezcla perfecta entre la grasa de la fritura y la frescura de la menta y la lechuga, la visita ya valió la pena sólo por el aperitivo.
Luego probamos los especiales de la casa: Pad Viet camarón(fideos de arroz con trozos de cedo, camarones, cilantro y salsa agridulce menos fuerte que la del Pad Thai, pero igualmente deliciosa), costillas de cerdo caramelizadas a la cebolla, Bo Bun Cha Gió(vermicelli con cerdo, vacuno, menta, maní, lechuga, cilantro y salsa vietnamita) y Chom chien(arroz con pollo, jengibre champiñones y cilantro). Los platos más atrayentes por consenso fueron el Pad Viet camarón y el Chom chien, el primero agridulce y maravilloso mientras que el segundo una mezcla arómatica muy alimonada y única. Las costillas más bien comunes y sin brillo(estaban agridulces pero no se sentía la cebolla ni estaban muy especiadas), el Bo Bun Cha Gió abundante, pero muy similar a las ensaladas Thai, sin sabores explosivos que llamaran la atención como el Pad Viet o el Chom Chien.
Para terminar, helados artesanales de jengibre limón y de maracuyá ambos un lujo y un mousse de chocolate blanco al coco y la frutilla, bastante bueno también. Todo acompañado de un carmenere Santa Ema y con café express y agüita de hierba fresca para terminar.
Recomiendo el Vietnam Discovery, porque tiene sabores únicos, precios accesibles y trae a este confin del mundo las deliciosas especialidades del sudeste asiático que de otra manera no conoceríamos jamás, un aporte para la variedad culinaria presente en nuestra capital.
Precios y menú en sitio web: www.vietnamdiscovery.cl